Buñuelos de caña o rizos extremeños

Hoy os dejo unos ricos buñuelos de caña o rizos extremeños, dulce ideal para celebrar el día del dulce typical spanich. En su 7ª edición. Iniciativa dirigida por Verónica y Patricia, que nos animan a divulgar la rica gastronomía española.

En esta ocasión tenemos que hacer un dulce  típico de la comunidad autónoma que siga, en orden alfabético, a la nuestra, como yo soy de Castilla-La Manca, me correspondería hacerlo de una comunidad con la letra D, pero al no haber ninguna será la siguiente letra E, por lo tanto toca Extremadura.

El origen de este dulce es árabe, crujiente y en forma de espiral. Pertenece a los llamados dulces de sartén o fritos.

Espero que os gusten tanto como a mí, porque es realmente delicioso. Perfecto para postres o para disfrutarlo como merienda.

Ingredientes:

     -   400g de harina común

     -   125ml de aceite de oliva

     -   125ml de vino blanco

     -   1/2 vasito de licor de anís o aguardiente (35g)

     -   piel de limón

     -   1 cucharada sopera de zumo de limón

     -   1 cucharadita de anís en grano 

     -   azúcar para rebozar

     -   aceite de girasol o de oliva para freírlos

     -   cañas o tubos metálicos

Ponemos en un cazo el aceite de oliva, la piel de limón y la cucharadita de anís en grano. Dejamos que se fría la piel un poco y apagamos el fuego, y sacamos las pieles de limón y dejamos los granitos de anís.

Lo ponemos en un bol y añadimos el licor de anís, el vino blanco, el zumo de limón. Mezclamos bien y añadimos la harina. Amasamos hasta formar una masa elástica que no se pegue en las manos. La tapamos con film transparente y dejamos que repose 30-40 minutos.

Untamos la mesa con un poquito e aceite y estiramos la masa finita, estiramos con el rodillo y la  cortamos en tiras de 1cm y medio de ancho y unos 15 cm de largo, enrollamos en los canutillos que previamente hemos metido en aceite caliente y los freímos en el aceite caliente. A fuego medio-bajo

Cuando veamos que se doran un poquito por fuera, retiramos la caña con un tenedor, aunque suelen despegarse solos, y dejamos que se frían también por dentro.

Los sacamos, dejamos que escurran encima de un papel de cocina y los rebozamos con azúcar o con miel...como os gusten más.

¡Quedan buenísimos!

Lo mismo os apetece hacer alguna de estas recetas que os dejo en vídeo, y suscribiros a mi canal de youtube.